El jefe de la OTAN elude pronunciarse sobre la petición de Sánchez de ayuda para proteger Ceuta y Melilla
No habrá mención explícita a Ceuta y Melilla en la hoja de ruta que guiará la estrategia defensiva de la OTAN durante los próximos diez años
Stoltenberg no aclara si Ceuta y Melilla estarán protegidas por la OTAN
Robles confirma que no habrá mención explícita a Ceuta y Melilla en la nueva estrategia de la OTAN
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido ayuda al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, para que la Alianza Atlántica defienda Ceuta y Melilla. Así lo ha trasladado tras el asalto que se produjo en Melilla la semana pasada, con la entrada de centenares de ilegales a nuestro país, y tras un giro en las relaciones diplomáticas tanto con Marruecos como con Argelia. Su petición, por eso, parece estar abocada a caer en un saco roto.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha avanzado en la mañana de este martes que no habrá mención explícita a Ceuta y Melilla en la hoja de ruta que guiará la estrategia defensiva de la OTAN durante los próximos diez años. La titular de Defensa ha explicado que «en el nuevo concepto estratégico se habla de la protección de la integridad territorial de cada uno de los Estados».
España exige a la OTAN que centre sus esfuerzos en lo que se conoce como flanco sur para atender a las amenazas procedentes de África, haciendo una mención explícita a las dos ciudades autónomas. El jefe del Ejecutivo ha advertido de la necesidad de que el concepto estratégico que se aprobará esta semana incluya una visión de «360 grados» con un propósito «rotundo» de que esta cumbre envíe un mensaje de unidad por parte de los aliados. Pero pese a la llamada de auxilio de Sánchez, Stoltenberg ha evitado mojarse.
Dice el presidente del Gobierno que «las democracias se unen para defender la democracia, los valores de libertad, pluralidad política, respeto a los derechos humanos y defensa de un orden internacional basado en reglas». Stoltenberg ha subrayado la importancia de marcar la «hoja de ruta» de la Alianza «en un mundo más peligroso y más impredecible», sobre todo tras el estallido de la invasión rusa en Ucrania y la amenaza que supone la digitalización.
Según ha detallado Stoltenberg, la Alianza pondrá en marcha cambios «importantes» en su política de disuasión y defensa con fuerzas «más preparadas, activas y equipos sobre el terreno». Además, acordará un «exhaustivo» paquete de medidas para que Ucrania «pueda mantener su derecho de autodefensa».
Sánchez y el líder de la OTAN han realizado este martes una visita a las instalaciones en Ifema que acogerán la cumbre durante los dos próximos días. Han recorrido los dos pabellones construidos para la ocasión, que ocupan un espacio de 50.000 metros cuadrados, y comprobado que todo está listo antes de que este miércoles arranque el cónclave. El recinto ferial se ha vaciado por completo y se ha blindado un perímetro de tres kilómetros alrededor de estas instalaciones para garantizar la seguridad de los líderes mundiales.
El líder de la OTAN ha querido agradecer personalmente a Pedro Sánchez su compromiso euroatlántico y la labor en la organización de la cumbre. También ha recordado el compromiso de España con la Alianza, que se materializa en las misiones internacionales en las que participan las Fuerzas Armadas. España forma parte de un despliegue de disuasión en Letonia, participa en las misiones de policía aérea del báltico y cuenta con buques de la Armada encuadrados en las patrullas marítimas permanentes en el Mediterráneo y el Mar Negro.